jueves, 16 de enero de 2014

Empezando con el pie derecho..



En esta nueva etapa se respira un aire de libertad, pero también se nota el peso académico que requiere un mayor aporte de responsabilidad, dedicación y compromiso. El cambio sin duda es mayúsculo y para algunos estudiantes, esta transición se convierte en un momento complicado en el que los nervios y la inseguridad son un compañero constante.


Adaptarse a los nuevos compañeros y profesores, a un ambiente académico más serio e incluso a los nuevos horarios, puede ser una tarea complicada, sobre todo para aquellos que descubren que esa carrera no era lo que esperaban, para los que se ven superados por el nivel de exigencia, o para quienes abandonaron su ciudad o Estado natal para ir en busca de sus objetivos escolares.

Para hacer este proceso más llevadero, las universidades preparan diferentes actividades y cursos de inducción, algunas incluso tienen áreas o departamentos que brindan asesoría vocacional y psicológica a los estudiantes de primer ingreso.